No cabe duda, el dios Pantone ha hablado. Dejemos atrás el Tangerine Tango, para dar paso a una nueva tonalidad:
«Vibroso. Radiante. Resplandeciente. El color de la elegancia y la belleza que aumenta nuestra sensación de bienestar, el equilibrio y la armonía.»
Personalmente, no puede gustarme más. Me encanta el color verde, más el esmeralda. Creo que es un tono que favorece muchísimo a todo tipo de personas. Realzando como nunca la personalidad, sofisticado y muy elegante. Conocido universalmente como color de la naturaleza, se le relaciona con la juventud, la esperanza, el crecimiento y la renovación. Energía y positividad, que se necesita y mucha, para el próximo año 2013.
¿Cómo se presenta?
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