Siluetas ajustadas y ultra-femeninas mediante cinturas muy marcadas y un largo que llegaba hasta la rodilla. Vestidos cóctel de satén con drapeados, vestidos largos con gran caída que imita al pétalo de una flor o incluso el llamado vestido babydoll de encaje y lentejuelas. Flores que junto a las mariposas hicieron que nos transladáramos a una garden party propio de los 70´s con un toque muy naïf y chic. Y es que, la moda te hace soñar y llevarte a lugares nunca vistos. Aquí os dejo una pequeño vídeo de lo que fue el desfile, un cúmulo de sensaciones recorre mi cuerpo, y es que un desfile tiene que atraparte en su esencia, y yo me quedo prendada al ver esta colección. ¡¡que arte!! Un maquillaje y peluquería exquisito, al igual que sus modelos y su escenografía. UN TODO. Puro amor.
Hubiera deseado estar alli…